Abril en Bariloche Empieza la sinfonía de colores.
Abril es mágico. La montaña comienza a pintarse con colores diferentes, preparándose para el invierno. Los árboles tienen una tonalidad mas nítida y algunos comienzan a deshojarse. Algunos paseos son muy recomendables para disfrutar tranquilos, durante todo el día. Recorrer Bariloche en Abril es descubrir cuadros constantes. Uno de ellos es Circuito Chico. Le aseguramos que nunca va a ver tanto color en la naturaleza. Alamos, retamas, abedules y las lengas en lo alto de la montaña forman un arco iris de amarillos, verdes, ocres y rojizos que asombran a cada vuelta de la ruta. Comenzar en el kilómetro dieciocho de Bustillo, y parar en el puente del lago Moreno. Luego en Punto Panorámico e ingresar a la Colonia. Colonia Suiza en otoño atrapa. Retomar el Circuito Chico y al llegar a la casa del guardaparque caminar por alguno de los dos senderos: el que va al Puente Romano o a Laguna Escondida. Dos caminatas breves para disfrutar del bosque. Al llegar al Llao Llao disfrutar de la vista y subir a la Capilla San Eduardo. En la Capilla cualquiera puede explicarle los asombrosos detalles de su construcción y de los cuadros que la embellecen. Donde estaban originariamente los cuadros de Raúl Soldi? Que representa el vitral?
Regresar temprano le va a permitir subir al Cerro Campanario. Y allí podrá observar los colores desde lo alto mientras disfruta del atardecer.
Otro paseo imperdible es el Cerro Otto. Allí se puede almorzar y luego caminar por los senderos que parten desde el complejo. Al regreso, dar un paseo por la galería de arte y adivinar el nombre de todas las montañas que se observan desde lo alto.
Para disfrutar de mas colores, Valle del Challhuaco, en el Refugio Neumeyer. Flores, colores, hojas y ramas, y mucho para aprender. Alrededor del refugio salen 5 senderos, que cualquiera puede realizar ya que son verdaderas «veredas» naturales en pleno bosque. Todos están debidamente marcados con diferentes colores, por lo tanto es muy fácil seguirlos. Algunos senderos de trekking son recorridos panorámicos y otros son senderos de interpretación botánica. Una buena idea es llegar temprano, caminar y regresar al refugio a almorzar (los precios son muy accesibles). Esta cerca del centro de la ciudad: salir a la ruta 40 a El Bolsón, entrar a la ruta de circunvalación y al kilómetro tomar el camino señalizado que sale a la derecha. Muy cerca. Al iniciar el camino, como todo en Bariloche, comienza la experiencia. Doce kilómetros pasando por 6 puentes que cruzan diferentes arroyos y a los costados los cerros Carbón, Ñireco, Ventana y Challhuaco.
Otoño es una sorpresa en cuanto al clima. Incluso quines disfrutan de la montaña pueden llegar a recibir la sorpresa de una nevada temprana. No intensa, pero lo suficientemente bella como para recordarla siempre.
FUENTE: EMPROTUR – Bariloche
