Un día en Toledo

A tan sólo 75km al sur de la capital de España, el trayecto en tren hacia Toledo desde Madrid (partiendo desde la Estación Puerta de Atocha) es de poco más de 30 minutos en servicio Renfe Avant de Alta Velocidad.

Toledo sorprende desde el mismo momento de llegar. Al traspasar los andenes el viajero se encuentra con una construcción que impacta por su belleza, por su arquitectura, el artesonado, toda la decoración con un perfecto trabajo de madera, hierro y azulejos de su interior, un edificio en estilo neomudéjar construido por el arquitecto Narciso Clavería en el año 1916 que es uno de los monumentos destacados en Toledo, declarado Bien de Interés Cultural en 1991.

Estación de Ferrocarril de Toledo
Javier Casado Poyales

Así comienza este recorrido, que maravilla a cada paso, y que contó con la magnífica compañía de Javier Casado Poyales, Guía Oficial de Turismo de Castilla – La Mancha, Gerente de Patrimonio Toledo, quien nos brindó una visita personalizada en este fascinante viaje al pasado.

El trayecto entre la estación del ferrocarril y el casco histórico es de poco más de dos kilómetros cuesta arriba, se puede hacer en taxi, en bus urbano o caminando, aprovechando el recorrido para disfrutar de una hermosa postal de la ciudad amurallada que conserva el trazado laberíntico de la Edad Media, bonitas casas como fondo y el río Tajo que bordea la escena y la completa. Entre los puentes, el río y el camino ondulante, divisamos una zona preparada con tirolesas para aquellos  visitantes a los que les gusta la adrenalina y la aventura.

Toledo

Toledo es Ciudad Patrimonio de la Humanidad declarado en 1986 por UNESCO, considerada un museo al aire libre por su arte, su historia, su arquitectura, un verdadero crisol de culturas que la han enriquecido, entre cristianos, judíos y musulmanes, que dejaron un gran aporte que se puede ver y sentir a cada paso al recorrerla. Sucesivamente esta tierra fue conquistada por los romanos, fue capital del reino visigodo, luego pasó a manos de los musulmanes, posteriormente capital del Imperio Español con Carlos V y, actualmente, es la capital de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha.

Río Tajo

Conocida como “La ciudad de las tres culturas”, Toledo ha albergado a tres civilizaciones y religiones disímiles pero que supieron convivir en relativa armonía. Ha sido fuente de inspiración para renombrados poetas, escultores, pintores, arquitectos, cineastas. Vale recordar la marca que dejaron personalidades ilustres como Miguel de Cervantes, El Greco, Lope de Vega, Garcilaso de la Vega. Además, el viajero en su paseo puede disfrutar de su gastronomía, sus artesanías, sus eventos y fiestas populares, sus espectáculos nocturnos, es realmente una experiencia para disfrutar con todos los sentidos. Es ideal destinar un día y una noche para conocer Toledo con tiempo, caminarla incesantemente, disfrutar del paseo mientras anochece y la ciudad se ilumina, perderse en sus callecitas medievales, vivir las experiencias y el sentir toledano.

Plaza de Zocodover

La estatua de bronce de dos metros de altura es obra del escultor Óscar Alvariño Belinchón, recuerda al genio literario español y a la importante presencia de Castilla-La Mancha y de Toledo en su obra, honrado por la ciudad en donde pasó diferentes períodos de su vida.

El punto de partida de la recorrida por el centro histórico es la Plaza de Zocodover, lugar que albergaba un “mercado de las bestias de carga” que es la traducción del término árabe.

Un espacio amplio, bordeado por edificios con características arquitectónicas del legado árabe, el punto neurálgico y social desde tiempos lejanos, donde se han realizado diversas actividades en sucesivas épocas como corridas de toros, mercadillo, los autos de fe de la Inquisición, procesiones, picota y ejecuciones públicas.

Antes de iniciar el camino para adentrarnos en Toledo, nos acercamos hasta la estatua a Miguel de Cervantes Saavedra, que se encuentra debajo del reloj, al bajar la escalera en el Arco de la Sangre.

Calle del Comercio

Empezamos la caminata por la Calle del Comercio, transitando por esta vía angosta y empedrada, donde comenzamos a ver numerosos locales especializados en mazapán, es inevitable detenerse y degustar esta delicia característica toledana y aquí adquiere un significado especial: se atribuye su origen a las monjas del Monasterio de San Clemente que en el siglo XIII elaboraban un pan (a base de  almendras machacadas en mortero con una maza) para aplacar el hambre en plena invasión árabe. Este es el origen del nombre Maza-Pan, una dulce experiencia en un elaborado de almendra, azúcar y manos artesanas locales que le imprimen un sabor único creando pequeñas figuritas.

Otras delicias de la repostería local son las pastas Toledanas: se trata de una empanadilla rellena de cabello de ángel cubiertas de almendras picadas.

Hay también tiendas que ofrecen otros productos manchegos como el azafrán, aceites, aceitunas, diferentes tipos de quesos, diversidad de jamones, embutidos,  vinos, legumbres, dulces, toda una tentación.

Damasquinador Oscar Martín Garrido

Sorprende también en el recorrido los prolijos negocios de artesanías y en especial de Damasquinado, una técnica decorativa árabe que en Toledo ha logrado un gran desarrollo y se ven fantásticas creaciones. Los artesanos realizan trabajos en joyería, espadas, platos, cuadros, a la vista del público, con gran dedicación, profesionalismo y precisión. En Toledo se han fabricado las espadas que podemos ver en las super producciones cinematográficas, entre las que podemos mencionar El Señor de los Anillos, Hobbit, Robin Hood, Gladiator , Braveheart y Alejandro Magno, dirigida por Oliver Stone. Se pueden conseguir en tiendas las réplicas de las que usaron los protagonistas de estas películas.

Visitamos el local del Maestro Artesano Damasquinador Oscar Martín Garrido. El proceso del damasquino es totalmente artesanal, iniciando por el picado de la superficie de acero a tratar para que pierda tersura y se le pueda incrustar hilo de oro 24 kilates y plata siguiendo el diseño y la creatividad del artesano (utilizando o no patrones) por lo que no hay dos piezas iguales. Luego se fija el oro a golpe de martillo y buril que aplana la pieza, para pasar al proceso de pavonado u oxidación química en líquido a alta temperatura que oscurece el acero y protege el damasquinado. Finalmente se bruñe el oro para acentuar el contraste del brillo del precioso metal con el aterciopelado acero negro.

Calles angostas, circuitos irregulares, esquinas abruptas, bajadas, subidas, diagonales, es posible pasar varias veces por el mismo lugar, es por eso que sugerimos organizar el recorrido para aprovechar el paseo y no omitir nada. O, tal vez, perderse en estas callejuelas y dejarse sorprender por las tantas historias que tienen para contarnos estas vías en cada vuelta de esquina.

Ayuntamiento y Palacio Arzobispal de Toledo

El trayecto nos lleva a divisar la torre de la Catedral de Toledo y llegar hasta la Plaza del Ayuntamiento, donde se encuentran el Palacio Arzobispal, una de las entradas de la Catedral y el edificio del Ayuntamiento.

Catedral de Toledo

La Catedral de Toledo es el monumento más emblemático de la ciudad. Su construcción se inició en 1227 y finalizó en 1493, se realizó sobre los cimientos de un antiguo templo visigodo del siglo VI que posteriormente se utilizó como mezquita en la época de invasión musulmana. Consagrada a la Virgen María en Asunción a los cielos, es la Catedral Primada de España. Símbolo espiritual de la Iglesia española, es una obra destacada del arte gótico con influencia francesa con elementos decorativos mudéjares y platerescos. Sin dudas, una de las catedrales más bellas del país.

Tiene numerosos atractivos en toda su superficie y requiere dedicar un buen tiempo para recorrerla y admirarla. Desde el exterior, sobre el frente, destaca la Capilla Mozárabe y la Torre Campanario de 90 metros de altura, donde conserva la Campana Gorda de 2.30 metros de altura y más de 7500 kilos de peso.

Cuenta con varias puertas, cada una de ellas con distintas características y un gran trabajo artístico en toda su construcción. La más antigua es la Puerta del Reloj (en la fachada norte). En el lado contrario, la Puerta de los Leones, la más bella y moderna, con relieves de la Asunción de la Virgen. En la fachada principal se encuentran la Puerta del Perdón, entre la del Juicio Final y de la Torre. El acceso del público se hace por la Puerta Llana, sobre la fachada sur.

Catedral de Toledo

El interior es impactante: de planta rectangular (de 120 metros de largo por 60 de ancho) dividida en cinco naves y con una girola o cabecera circular. Sus 88 columnas y 72 bóvedas de crucería la elevan y sujetan el techo. Hermosas vidrieras policromadas permiten el ingreso de la luz del exterior. La Capilla Mayor cuenta con un imponente retablo de madera policromada y dorada. Frente a él está el bellísimo Coro, magnífica obra escultórica compuesto por la sillería alta y baja con infinitos detalles, presidido por la dulce imagen de la “Virgen Blanca”, escultura gótica francesa del siglo XVI, y flanqueado por dos monumentales órganos sobre la tribuna.

Catedral de Toledo – Coro

Recorremos las capillas laterales: de los Reyes Nuevos, de San Ildefonso, la del Sagrario (con la imagen de la Patrona de Toledo), de San Blas, de San Pedro, de Santiago, cada una de ellas decoradas con un arte incomparable que es un gran legado.

Sacristía

La Sala Capitular, la Sacristía, son verdaderos museos en sí mismos. En esta última se encuentra un imponente fresco de Lucas Jordán representando la Descensión de la Virgen en la imposición de la casulla a San Ildefonso; cuadros de Goya, Vand Dick, El Greco, Zurbarán, Tiziano, Orrente, Rubens, Morales, Caravaggio, entre otros reconocidos artistas.

Custodia Procesional

En el Cuarto del Tesoro se pueden apreciar importantes obras de orfebrería, entre las que se destaca Custodia Procesional, realizada por el platero de origen alemán Enrique de Arfe hacia 1515. Esta joya de plata dorada de más de 3 metros de altura, está concebida como una torre gótica de planta hexagonal para albergar al Ostensorio de oro que perteneció a la Reina Isabel la Católica y, según dice la leyenda, fue realizado con el primer oro llegado de América. La Custodia sale en procesión por las calles de Toledo para ser venerada por los fieles en las festividades de Corpus Christi.

Otra joya importante para ver en la Catedral de Toledo es el Transparente, obra cumbre del barroco español. De espaldas al Altar Mayor, esta obra maestra que une elementos arquitectónicos, escultóricos, pictóricos y lumínicos fue concebida por el arquitecto español Narciso Tomé en 1732. Se trata de un retablo donde se utilizaron mármoles, alabastros, jaspes y bronces para sus grupos escultóricos; en el centro del retablo hay un óculo a modo de sol con rayos que permite el paso de la luz natural que entra desde una claraboya en el techo de la girola, atravesando el retablo e iluminando celestialmente el Sagrario del Altar Mayor.

Trasaltar Mayor – El Transparente

Es recomendable reservar una visita guiada para conocer la Catedral con información detallada sobre sus características e historia.

Iglesia de San Ildefonso

La Iglesia de San Ildefonso, considerado el mayor templo barroco de la ciudad de Toledo, es otra visita recomendada.

Es denominada la “Iglesia de los Jesuitas” y según se indica está construida sobre la casa natal de San Ildefonso, Patrono de Toledo.

Fue abierta en 1718, tiene destacadas esculturas barrocas en su nave principal, dorados retablos en las capillas laterales y dos torres laterales que ofrecen una vista fabulosa de la Ciudad.

El próximo paso de esta recorrida puede ser la Iglesia de Santo Tomé. La iglesia data del siglo XII y fue reconstruida antes de finalizar el siglo XIV por gestión de Don Gonzalo Ruiz de Toledo, notario mayor de Castilla y señor de la villa de Orgaz, gran benefactor de la Iglesia y de la ciudad de Toledo. El templo conserva su torre de planta cuadrada, uno de los mejores exponentes del mudéjar toledano. En el interior de la capilla de La Concepción descansan los restos del Señor de Orgaz y se exhibe la obra cumbre de El Greco: “El Entierro del Señor de Orgaz”.

La Sinagoga del Tránsito es un lugar que el viajero no puede dejar de conocer, un espacio con una historia particular y donde se refleja la arquitectura y el arte hebreo en España. Se llamo la Sinagoga de Samuel Ha Leví, construida a mediados del siglo XIV. El edificio pasó a la Orden de Calatrava cuando expulsaron a los judíos de España en el siglo XV. Posteriormente fue Iglesia de San Benito, más tarde del Iglesia del Tránsito, por tener un cuadro del Tránsito de Nuestra Señora. Luego Sinagoga del mismo nombre, hoy es el Museo Sefardí, con importantes obras de arte, arqueológicas, antropológicas y etnológicas y está muy bien conservada. Aquí se muestra la convivencia de las tres culturas que coincidieron en Toledo, un ejemplo de ello es la Sala de Oración, construcción de estilo árabe, techos realizados por carpinteros católicos, parte del suelo y el altar de lo de que fue la sinagoga original. La una riqueza decorativa extrema y desbordante en el interior se contrapone al austero aspecto exterior.

Sinagoga del Tránsito – Museo Sefardí

Seguimos recorriendo la antigua judería de Toledo, el legado hebreo que todavía perdura en la ciudad. La Sinagoga de Santa María la Blanca, que data del siglo XII y fue la Mayor Sinagoga de Toledo, es una referencia de la cultura y la arquitectura mudéjar, con sus blancos pilares octogonales que unen arcos de herradura.

Monasterio de San Juan de los Reyes

El Monasterio de San Juan de los Reyes, se realizó por encargo de los Reyes Católicos para recordar la victoria sobre los portugueses en la batalla de Toro en 1476, y como lugar elegido por Fernando e Isabel para tener sepultura (aunque finalmente fueron enterrados en Granada).Esta obra del maestro Juan Guas es considerada uno de los mejores exponentes del gótico castellano.

Museo de la Santa Cruz

El Museo de la Santa Cruz ocupa el edificio del Hospital construido a principios del siglo XVI, de estilo plateresco.

Alberga tapices, armaduras y espadas damasquinadas, esculturas y pinturas de importantes artistas como distintos lienzos de El Greco (“La Asunción de la Virgen”, “Inmaculada Concepción”, “La Verónica”).

El Alcázar de Toledo, símbolo de la ciudad, es un edificio fortificado que mandó constuir Carlos V en 1535, en el lugar ocupado anteriormente por fortalezas romanas, visigodas y musulmanas. En la actualidad aquí se encuentra el Museo del Ejército.

Alcázar de Toledo

El Corpus Christi es una celebración muy especial, entre las más importantes de Toledo y desde 1980 es Fiesta de Interés Turístico Internacional. Cuenta la leyenda que la procesión se realiza desde el año 1418, cuando todavía no estaba terminada de construir la Catedral. Este gran acontecimiento se prepara a partir que los vecinos engalanan sus balcones con mantos eucarísticos, los patios toledanos se “visten” con sus mejores colores. En las plazas por donde pasa la peregrinación se organizan arcadas de flores y ramas, en la madrugada previa se prepara el camino con hierbas aromáticas (tomillo, azahar, romero) y un toldo muy especial, insignia de esta celebración que se ubica a modo de cielo en el paso de la Custodia Procesional de Enrique de Arfe que llega desde la Catedral, acompañada por una lluvia de pétalos procedente de los balcones. El amplio recorrido que se realiza por la ciudad se detiene en la plaza de Zocodover para que el Arzobispo brinde un sermón para luego continuar.  En la Semana del Corpus Christi se generan múltiples actividades culturales, deportivas, exposiciones y festivales. Sin duda una fecha muy especial para visitar Toledo, al igual que en la Semana Santa (Fiesta de de Interés Turístico Internacional).

Cabe destacar que el 23 de noviembre de 2021 se celebrará el VIII centenario del nacimiento de Alfonso X El Sabio, referente de la cultura castellana y española. Será un gran evento de proyección internacional, celebración que se estima prolongar hasta noviembre de 2022, con una serie de actividades educativas y culturales.

Toledo

Hay muchas propuestas para visitar Toledo durante todo el año. Recomendamos visitar el calendario de eventos y celebraciones para disfrutar de otro atractivo más durante la estadía. Para visitar con niños, con familia, en grupos o de manera individual, se puede recorrer Toledo siguiendo distintas rutas temáticas, como el Toledo de El Greco, el Toledo de Cervantes, la Ruta del Renacimiento, la Judería Toledana, los Conventos, los Patios y los Claustros Toledanos, el Toledo Hispanomusulmán y Mudéjar, las Puertas de Toledo… o simplemente dejarse sorprender por el riquísimo patrimonio de su centro histórico en una visita a pie y siempre con calzado cómodo.

Toledo es una ciudad que precisa más de una jornada de 8 horas para conocerla con detalle. La recomendación es hospedarse por lo menos una noche, y así también tener la posibilidad de disfrutar de la “noche toledana”, con una buena copa y tapeo al caer la tarde, en sus restaurantes con patrimonio, en los tradicionales “cigarrales” (predios señoriales en la orilla del Rio Tajo) o en bonitos bares del centro histórico, con música en vivo, brindis en las terrazas y vivenciar los juegos de luces que van proyectando sobre el Alcázar, la muralla, o la torre Santo Tomé.

Es tanta la riqueza patrimonial de esta ciudad que el recorrerla nos invita a querer regresar.

El Diario de Turismo agradece a la Consejería  de Turismo en Buenos Aires de la Embajada de España en Argentina y a Patrimonio Toledo por la organización de nuestro recorrido por Toledo en enero de 2020.

FRANCISCO SIMONE y LUCIANA PERUZZO para EL DIARIO DE TURISMO

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